El aguinaldo era una especie de paga extraordinaria de Navidad que daba el patrón a sus trabajadores. Existía la costumbre de dar un poco de dinero en un sobre a cada uno de ellos que llevaba el nombre de “aguinaldo”.
También existía la tradición entre los niños de muchos pueblos de España “pedir el aguinaldo”casa por casa mientras cantaban villancicos. Normalmente la gente les daban dulces, caramelos u otro tipo de comestibles como los denominados hoy en día: unos “chuches”, en lugar de dinero.
Al llegar estas fechas había otros colectivos de trabajadores que pedían puerta a puerta de las casas el aguinaldo y a cambio te entregaban unas tarjetitas en donde te deseaban Felices Pascuas. Al parecer, todavía hay barrios de Madrid en donde no se ha perdido esta tradición. Los barrenderos, los regadores, los basureros, los carteros… Todo el mundo a pedir.
Y si hablamos de estratos sociales de mayor poder adquisitivo, el aguinaldo se traduce en unas botellas de vino o de cava, turrones, algún jamón e, incluso, un gran surtido de todos ellos juntos depositados en las famosas “cestas de Navidad”.
Pero volvamos al aguinaldo en su interpretación más humilde y como muestra van aquí unas tarjetas que se entregaban a cambio de unas monedas.
1 comentario:
Estas imágenes me han retrotraido a esos años en los que a uno sólo le preocupaba en estas fechas que los juguetes de los Reyes llegasen cuanto antes.
Ahora tengo 48 y si a esta cifra le quito 40, me sitúo justamente en esos días en los que esas postales anunciaban que los anhelados juguetes estaban ya de camino.
Pues claro que me acuerdo...¡¡ cómo no me voy a acordar !!...
Eran otras épocas, otras circunstancias...todo era de color de rosa, o al menos eso nos parecía a los más enanos de la casa.
Pero en fin, el tiempo, ese tmible enemigo que siempre lo tenemos delante y nunca lo vemos, hace su trabajo lenta y paulatinamente.
Pero como bien decía un paisano mío que vivió en Bílbilis y en Roma hace 2000 años, vivir de los recuerdos de la vida es vivir dos veces. Frase que tú Julio, seguro que habrás visto por algún lado.
Qué bonito es recordar la niñez...qué bonito es recordar los tiempos en los que el término "preocupación" no existía en nuestros diccionarios...
En fin...Julio...¡¡qué decirte yo cuando aún no había nacido y tú ya habías superado esa niñez Y YA TE HBÍAS MARCHADO DE EL PARDO CASI...!!.
Lo dicho...sirva este comentario para desearte a tí y a los tuyos que estas navidades las disfrutes igual o mejor que cuando llegaban esas postales a tu casa...pero sobre todo, como popularmente se dice, ¡¡ que nos quiten lo bailao!!
FELIZ NAVIDAD Y FELIZ 2010.
Desde la capital del Ebro, uno de los autores de ese otro blog que cada vez va teniendo más adeptos y algún que otro contratiempo, te envía el más caluroso de los aguinaldos...¡¡ LA AMISTAD !!
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